[Escrito el 20 de mayo de 2022. Versión publica en en Listín Diario 23 de mayo de 2022]
El pueblo dominicano está siendo azotado por los apagones. La causa
principal de esos apagones es la salida no programada -y por un tiempo
excesivamente largo- de la Unidad 1 de la Central Termoeléctrica Punta Catalina
(CTPC). Ésta y la Unidad 2 constituyen la principal fuente de electricidad de la
República Dominicana, supliendo alrededor del 30% de la demanda del Sistema Eléctrico
Nacional Interconectado (SENI).
De acuerdo con el documento CTPC-DP-DT-2022-0011 emitido el 30 de marzo
de 2022 por los principales técnicos de Punta Catalina, la parada de la Unidad
1 estaba programada para el 1 de junio de 2022. El objetivo era realizar las
actividades de mantenimiento recomendadas por los fabricantes de los equipos.
Esa fecha del 1 de junio era totalmente compatible con la salida por
mantenimiento de los 300 MW de AES Andrés, programada durante el mes de abril
de este año. Dada la cantidad de reserva fría que existe en el país, la salida
de AES Andrés, la segunda fuente de electricidad del país, no debe provocar
cortes de electricidad o apagones generalizados, siempre y cuando se encuentren
en línea las dos unidades de Punta Catalina.
Lamentablemente, el 27 de marzo de 2022, durante el proceso de arranque
de la Unidad 1 de CTPC ocurrió una avería mayor, descrita en el reporte de
incidencia “I&C 27-03-2022-Evento Tubería Vapor CRH U1.” Un error de
operación del equipo técnico, durante la puesta en servicio de esa unidad,
generó un golpe de ariete (water hammer), que provocó fuertes movimientos y
daños en la tubería de vapor de recalentado frío (CRH). Ante esa avería mayor,
los técnicos de Punta Catalina recomendaron que las reparaciones necesarias
fuesen evaluadas y dirigidas por personal especializado de la firma fabricante
de la caldera de Punta Catalina, Babcok & Wilcox.
El 7 de abril de 2022, la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas
Estatales (CDEEE), en base al informe justificativo preparado el 30 de marzo por
los peritos técnicos de Punta Catalina, autorizó de urgencia la contratación de
servicios técnicos de los técnicos de Babcok & Wilcox, para que realizaran
una evaluación de los daños ocurridos en la línea de vapor recalentado frío.
También se aprobó la compra de los repuestos y consumibles necesarios para
llevar a cabo esa reparación.
El 4 de mayo de 2022, la CDEEE aprobó el uso de la excepción por
proveedor único para contratar el servicio de instalación de soportes, mangos y
amortiguadores de la línea de recalentamiento en frío de la Unidad 1 de Punta
Catalina. Ese trabajo lo realizará la empresa RG Engineering Inc., representante
de Babcock & Wilcox Company, por un monto superior al medio millón de
dólares.
Esa avería mayor, provocada por una mala operación, se ha traducido en
que la Unidad 1, con sus 376 MW brutos, haya estado fuera de línea por casi dos
meses, acentuando el desabastecimiento de electricidad que ha afectado
negativamente al pueblo dominicano. Por eso es indispensable mejorar la
capacidad de gestión operativa de las unidades de generación eléctrica de Punta
Catalina.
Cabe destacar que el presidente Luis Abinader mediante el Decreto 536-20
del 6 de octubre de 2020 encargó al ingeniero César Sánchez, pasado
administrador de la CDEEE y uno de los mejores técnicos que existe en el país,
de llevar a cabo un proceso de licitación pública internacional para la
contratación de una firma experta que se encargase de la Operación y Mantenimiento
(O&M) de las dos unidades de la Central Termoeléctrica Punta Catalina. Un
total de 43 firmas, entre las cuales se encuentran varias con experiencia a
nivel global, mostraron en marzo de 2021 su interés de participar en ese
proceso de licitación.
El equipo encabezado por César Sánchez entregó al Ministerio de Energía
y Minas hacia mediados de mayo de 2021 los borradores de los pliegos de
licitación para la contratación de la empresa que se encargaría de suplir los
servicios de O&M a la CTPC. La documentación para ese proceso, que se tenía
previsto iniciar el 24 de mayo de ese año, incluía las propuestas
administrativas, las especificaciones técnicas y las propuestas económicas, así
como el borrador del contrato.
Es una lástima que el Ministerio de Energía y Minas haya suspendido esa
licitación, cuya prioridad se acrecienta debido al despido en septiembre de
2020 de los superintendentes de operación y mantenimiento, profesionales de
amplia experiencia entrenados por el Consorcio constructor y por los
fabricantes de los equipos -como General Electric, Babcok & Wilcox, Hamon,
Siemens, Flowserve, ABB, ONT, entre otros- en todos los detalles tecnológicos
de Punta Catalina.
Ante esa situación y la necesidad de fortalecer el equipo humano
encargado de la operación de Punta Catalina, le recomiendo al presidente
Abinader que ordene la contratación transitoria de la empresa Tecnimont, parte
del Consorcio constructor, que fue la encargada del comisionamiento y puesta en
marcha de Punta Catalina. Ese apoyo de Tecnimont en operación y mantenimiento
le transferirá conocimientos precisos al equipo técnico actual y le ayudará a
minimizar los errores de operación, elevando la cantidad de horas que podrán
estar en línea las dos unidades de esa poderosa central, supliendo electricidad
a favor del pueblo dominicano.
Estoy seguro de que, si las dos unidades de generación de Punta Catalina
estuviesen generando electricidad, los apagones, si los hubiese, serían
mínimos. Esa afirmación se puede verificar fácilmente. Basta con analizar las
estadísticas de la cantidad de circuitos sin electricidad cuando las dos
unidades de Punta Catalina están operando a plena capacidad y se confirmará que
son muy pocos.
Así las cosas, mientras se instalan los 2 mil MW que el gobierno anunció
para los próximos años, lo óptimo para el sector eléctrico y el pueblo
dominicano es mantener en línea a Punta Catalina el mayor tiempo posible. Eso
implica, además de un buena operación y mantenimiento, la compra oportuna y al
mejor precio posible del carbón, la cal, los consumibles y los repuestos
fundamentales. Una buena planificación administrativa ayudaría a que Punta
Catalina cumpla con su principal objetivo: ser la columna vertebral del sistema
eléctrico nacional.