lunes, 15 de septiembre de 2014

Inversión pública, privada y crecimiento

[Escrito el 12 de septiembre de 2014]

La inversión pública puede ser un apoyo importante para el desarrollo nacional. La creación de infraestructura básica, como carreteras, puertos, aeropuertos, presas, canales de riego, estimula la actividad económica e induce a que el sector privado aumente su inversión.

En ese caso las inversiones, pública y privada, son complementarias. Un aumento de la pública eleva la privada.


Lamentablemente, esa correlación no es siempre positiva. Si la inversión pública crece en exceso y absorbe una gran cantidad de recursos financieros domésticos, se produce un desplazamiento hacia abajo de la inversión privada.

En el 2012, la inversión pública, como porcentaje del PIB, se expandió en tres puntos porcentuales, llegando a un 6.6% del PIB. Ese aumento de la inversión creó un déficit público de 6.7% del PIB, lo cual provocó un estado de incertidumbre que disminuyó la inversión privada en cinco puntos porcentuales. La consecuencia de la reducción de la inversión privada fue la disminución del rimo de crecimiento del PIB real a un 2.7%.

En contraste, en 2013, la reducción del déficit del sector público no financiero a un 3.6% del PIB creó las condiciones para que la inversión privada se expandiera, colocándose en un 17.6% del PIB, lo cual –junto al aumento de las exportaciones- aceleró el ritmo de crecimiento económico hasta colocarlo en un 4.6%.


Esto demuestra que se puede crecer más con un menor déficit público.  

No hay comentarios:

Publicar un comentario