lunes, 28 de febrero de 2022

Posibles escenarios de la guerra entre Rusia y Ucrania

[Escrito el 25 de febrero de 2022]

El profesor de la Universidad de Chicago, Paul Poast, autor del libro Economía de la Guerra, identifica cuatro posibles escenarios de la guerra provocada por la decisión de Rusia de invadir a Ucrania.

Primer escenario, se establece un gobierno pro-ruso en Kiev, apoyado por fuerzas militares rusas. Ese no sería un equilibrio estable, pues es muy probable que se origine una guerrilla urbana que dificulte la gobernabilidad y que Rusia se “empantane en un atolladero militar.” En el segundo escenario Rusia se anexa a Ucrania, que desaparece como Estado independiente. Tercero, los rusos, ante la victoria en Ucrania, deciden recuperar todos los territorios de la antigua Unión Soviética. Esto desestabilizaría a Europa completa e involucraría de lleno a los Estados Unidos. Y cuarto escenario, Rusia reorienta la confrontación hacia los países del Báltico miembros de la OTAN y que antes eran parte de la Unión Soviética, escalando la guerra a niveles mundiales.

El profesor Poast considera que el escenario resultante dependerá de las ansias de poder de la dirigencia rusa y de qué tan fácil resulte vencer militarmente a Ucrania, pues esto puede llevar hacia un rápido escalamiento, como lo sucedido cuando Hitler derrotó a Polonia con la táctica de guerra relámpago (Blitzkrieg).

Ojalá que se llegue pronto a una negociación diplomática que minimice la pérdida de vidas humanas. Esto se lograría en el corto plazo si se entiende que, a pesar de la invasión rusa a Ucrania, no se ha llegado a un punto de no retorno tal como se define en la Teoría de la Guerra de Rubicón, presentada por los profesores Dominic Johnson de la Universidad de Edimburgo y Dominic Tierney del Swarthmore College. Basándose en esa teoría, se argumenta que la victoria rusa pudiera generar en ese país un exceso de optimismo y confianza que reduciría las posibilidades de una solución negociada, llevando a que, como indica el profesor Poast de la Universidad de Chicago, una pequeña guerra se convierta en una gran guerra.

En todos los escenarios citados la situación económica mundial se deterioraría, aumentando los precios de los combustibles y de los alimentos. La situación se complica al tomar en consideración el arsenal nuclear ruso. La entrada de la OTAN, o de los Estados Unidos, elevará el riesgo de que pueda ocurrir un ataque con armas con mayor poder destructivo. Un desenlace verdaderamente terrible para la humanidad.

Los efectos sobre la economía dominicana de la invasión rusa a Ucrania

[Escrito el 24 de febrero de 2022]

El mundo recibió esta madrugada la noticia de que el poderoso ejército ruso inició sus operaciones en territorio de Ucrania, bombardeando áreas militares estratégicas y penetrando con tanques de guerra por diversos pasos fronterizos. Ese evento puede impactar a la República Dominicana tanto por el lado de la oferta como por el de la demanda.

Ucrania es el quinto productor de maíz y el séptimo de trigo del mundo. Rusia, por su parte, es el principal suplidor de trigo. La guerra en ese territorio y las sanciones de los Estados Unidos y Europa a Rusia pudieran reducir significativamente el flujo de esos productos al mercado internacional, provocando el aumento de sus precios. Ese incremento de costos implicará en la República Dominicana un aumento del precio de la harina, el pan, la carne de pollo y cerdo, los huevos, entre otros alimentos de consumo masivo.

Por otro lado, los precios del gas natural, del petróleo y sus derivados acelerarán su ritmo de crecimiento. Alemania detuvo el gasoducto de gas natural Nord Stream 2 y el Reino Unido apela a que toda Europa deje de consumir el gas natural -que representa el 40% de la demanda europea- y petróleo ruso -que suple una tercera parte del consumo europeo-. Hoy el precio del barril de crudo superó, por primera vez desde 2014, los 100 dólares. Para la República Dominicana esto significa mayores precios en las estaciones de expendio de gasolina, gasoil y GLP, lo cual se traduce en mayor costo de transporte.

Esos mayores costos de producción dificultarán la lucha que los bancos centrales llevan a cabo contra la inflación a nivel global. En consecuencia, el tiempo para alcanzar la meta de inflación será más largo o la tasa de interés requerida será mayor, reduciéndose la demanda agregada, específicamente el consumo y la inversión de los agentes económicos privados. Mayor tasa de interés en los mercados de capitales y menor crecimiento económico internacional impactarían desfavorablemente a la economía dominicana.

La perspectiva de una nueva disrupción de la cadena de suministro a nivel internacional ha provocado un fuerte descenso de los índices bursátiles. El Stoxx 600, que mide el comportamiento bursátil en Europa, se redujo en un 3.5%, reflejando las caídas en Alemania, Francia, Italia y el Reino Unido. El deterioro de la riqueza financiera se traduce en menor consumo y, en consecuencia, en un menor ritmo de crecimiento del PIB a nivel global. Para la República Dominicana, cuya principal fuente de divisas es el turismo, no le conviene ni la guerra ni el deterioro de los ingresos de esa población, en particular de Rusia y Ucrania que son dos importantes puntos de origen de los turistas que visitan al país.

La intensidad de los efectos citados dependerá del grado de escalamiento del conflicto bélico. En el comentario de mañana se analizarán cuatro posibles escenarios. 

jueves, 24 de febrero de 2022

La irracionalidad de la guerra

[Escrito el 23 de febrero de 2022]

Rusia, al reconocer como repúblicas independientes dos territorios separatistas de Ucrania, ha dado un paso hacia la guerra. Un nuevo evento destructor de bienestar, que pudiese arropar a todo el mundo. Una vez más queda demostrado que el ser humano no aprende las lecciones de la historia y le encanta cometer errores extremadamente costosos.

La guerra destruye capacidad de producción, de creación de ingresos y bienestar. La pérdida de vidas humanas en un evento bélico es un acto irracional. La desaparición de cerebros significa menor capacidad de resolver problemas que afectan a la humanidad o, a través del arte, de ser partícipe de la obra divina de la creación. Entre esos jóvenes que van a la guerra y que no volverán hay muchos que pudieron ser mejores que un Copérnico, Newton o Einstein. O quizás mejores que un Mozart, Beethoven o Wagner. O tal vez superiores a un Goethe, Cervantes o Shakespeare.

El pueblo de Ucrania será la gran víctima. Es en su territorio que se enfrentarán poderosos ejércitos, capaces de destruir el mundo con su arsenal nuclear. Las autoridades de Ucrania han movilizado a sus reservas y ha declarado el estado de emergencia. ¿Se imaginan ustedes del estado de ansiedad que debe estar viviendo la población que habita en ese país? La impotencia de los padres, al sentir que no podrán proteger a sus hijos en medio de esa guerra, debe ser terrible. Desgarradora.  

Las consecuencias económicas ya se están notando. Los mercados bursátiles, que recogen el valor presente del flujo de beneficios esperado por las empresas cuyas acciones allí se cotizan, han retrocedido de manera significativa. El Nasdaq cayó hoy en 2.6%, y en lo que va de año ha descendido en un 18%. El S&P 500 disminuyó en 1.8%, acumulando un descenso a la fecha de 12%. Y el Dow Jones retrocedió en 1.4%, y en lo que va de año ha caído 9%. Los precios de los combustibles, de los alimentos y sus insumos, aumentarán de forma más acelerada si inicia el conflicto armado. Y todo esto en medio de la peor inflación que se observa en décadas.

Hoy Estados Unidos y Europa adoptaron sanciones económicas contra Rusia. Específicamente establecieron restricciones a las transacciones con deuda soberana rusa, así como a bancos rusos que tienen operaciones en las nuevas repúblicas Donetsk y Lugansk, y restringió la capacidad de hacer operaciones económicas internacionales a los principales funcionarios de Rusia. Alemania detuvo el gasoducto de gas natural Nord Stream 2. Es altamente probable que Rusia responda contra esas sanciones.

Así las cosas, ojo por ojo, pronto se quedarán ciegos todos en este mundo, creado por Dios para unos fines mucho mejores que la guerra.

miércoles, 23 de febrero de 2022

Detalles sobre el crecimiento económico y la inflación durante la pandemia

[Escrito el 22/2/22]

La economía dominicana, medida por su producto interno bruto (PIB), se expandió en un 12.3% en 2021 con relación al año anterior y, si se compara con el producto de 2019, el crecimiento económico fue de 4.7%. Con esas variaciones, calculadas en base a las estimaciones del PIB realizadas por el Banco Central usando la misma metodología de años anteriores y que ha sido avalada por organismos internacionales, se puede determinar que la tasa de crecimiento promedio geométrico del período 2019-2021 se colocó en 2.3%.

Ese desempeño económico fue uno de los mejores de América Latina, según las cifras más recientes publicadas por cada país. Cabe destacar que Nicaragua y Guatemala alcanzaron tasas de 3.7% y 3.1%, respectivamente. Chile, la estrella de la región sudamericana, registró un crecimiento promedio geométrico de 2.7%. Paraguay, 2.1%; Costa Rica, 1.6%; Colombia, 1.2%. Por otra parte, varios países registraron variaciones promedio negativas, resaltando Bolivia, -2.4%; Ecuador, -2.3; México, -1.9%, entre otros.

Al comparar la tasa de crecimiento promedio de 2.3% alcanzada por la República Dominicana, con el promedio registrado en el período 1992-2019 se observa que se encuentra por debajo de su potencial, que es de 5.5%. Esto revela que la economía dominicana ha mejorado, pero falta todavía mucho trabajo por delante para recuperar el producto que se dejó de generar por la pandemia del covid-19.

Esa desviación del crecimiento económico con relación a la tendencia de largo plazo sugiere que una parte significativa de la inflación de 2019-2021, que se colocó como promedio anual en 7%, se explica por factores externos, como son los derivados de la disrupción de la cadena de suministros, el aumento de los precios de los combustibles e insumos básicos para la producción de alimentos, y el alza de los fletes, entre otros. Sin esos factores exógenos, provocados por la pandemia y las tensiones geopolíticas, es altamente probable que, con una tasa de crecimiento promedio del PIB de 2.3%, la tasa de inflación promedio anual hubiese quedado por debajo de 3.2%.

Al descomponer por sectores o actividades económicas se observa que las mayores tasas de crecimiento promedio en el período 2019-2021 fueron: Manufactura de Zonas Francas, 8.2%; Salud, 5.9%; Construcción, 4.9%; Manufactura Local, 4%; Comercio, 3.6%; y Agropecuario, 2.7%. De ese grupo seleccionado, sólo Manufactura de Zonas Francas y Salud se colocaron por encima de la tasa de crecimiento de largo plazo. Esa es otra evidencia, ahora a nivel desagregado, que sugiere que la presión sobre los precios domésticos se debe preponderantemente a la inflación importada. Afortunadamente, la política económica ejecutada en ese período ha logrado mantener la confianza en el peso dominicano, lo cual ha amortiguado el efecto de los precios internacionales sobre la inflación local.

Las políticas prioritarias del Fondo Monetario Internacional

[Escrito el 21 de febrero de 2022]

Kristalina Georgieva, director gerente del Fondo Monetario Internacional, presentó recientemente un interesante análisis de la situación económica internacional que incluye tres políticas prioritarias para alcanzar una recuperación económica sólida a nivel global.

Antes de comentar esas recomendaciones del Fondo, es necesario resumir los riesgos e incertidumbres que atentan contra el crecimiento económico. El covid-19, aun cuando se considera que va de salida, sigue afectando la cadena de suministro, provocando un desequilibrio entre oferta y demanda de bienes que se traduce en aumentos significativos de precios. Las tensiones geopolíticas, el aumento de los precios de los combustibles y la expectativa de que los principales bancos centrales ajustarán pronto las tasas de interés han aumentado el grado de volatilidad de los mercados de capitales, creando un entorno desfavorable al crecimiento económico.

Visto ese entorno macroeconómico, el FMI presenta sus recomendaciones de políticas.

La primera consiste en redoblar esfuerzos en la lucha contra el covid-19. En ese aspecto hay que reconocer el excelente trabajo realizado por el gobierno del presidente Abinader, que ha logrado aplicar más de 15 millones de dosis de vacunas, beneficiando a casi 5.9 millones de dominicanos que ya tienen dos dosis. El organismo internacional estima que hacia el año 2024 se habrá registrado una pérdida de producto interno bruto acumulada a nivel global de casi 13.8 millones de millones de dólares. Y cuantifica que la pérdida de escolaridad, productividad y empleo provocada por esa pandemia representará a los jóvenes, de países ricos, emergentes y pobres, un monto de 17 mil millones de dólares a lo largo de sus vidas. El aumento del gasto social y la ejecución de programas de tutorías para los estudiantes pudieran ayudar a reducir ese impacto negativo.

La segunda política recomendada por el Fondo es la aplicación de una postura monetaria más restrictiva para enfrentar la inflación. Se prevé que la Reserva Federal de los Estados Unidos aumente su tasa de interés en marzo, al igual que lo hizo a finales del año pasado el Banco de Inglaterra. Se espera que el Banco Central Europeo esté preparado para hacerlo en cualquier momento. En el caso de la República Dominicana, el gobernador del Banco Central, Héctor Valdez, decidió, de manera correcta y oportuna, iniciar el cambio de la postura monetaria, subiendo la tasa de interés de referencia en 200 puntos básicos entre noviembre de 2021 y enero de este año. La reducción de la volatilidad cambiaria, una marca de fábrica de Valdez, ha logrado amortiguar el impacto de la inflación externa sobre la inflación nacional.

Por último, el Fondo recomienda a los países que adopten medidas que favorezcan la sostenibilidad fiscal.  La mejora de los ingresos y la disminución de gastos no necesarios reduciría el monto requerido de financiamiento público. Esto es clave para la reducción de la deuda pública y la estabilidad macroeconómica.

viernes, 18 de febrero de 2022

Análisis de la nueva emisión de bonos soberanos

[Escrito el 17 de febrero de 2022]

El Ministerio de Hacienda colocó ayer bonos soberanos por la suma de 3,564 millones de dólares. Esos recursos se usarán para financiar el déficit público del año 2022 y para hacer una operación de gestión de pasivos.

La emisión de bonos se realizó en dos tramos. El primero con vencimiento al año 2029 y cupón de 5.5%. El segundo con vencimiento al 2033 y cupón de 6%. Al analizar la evolución entre enero y febrero de este año de la tasa de rendimiento de los bonos del Tesoro de los Estados Unidos y de la prima de riesgo que paga la deuda soberana dominicana, se observa que, si el Ministerio de Hacienda hubiese colocado esa deuda en la primera semana de enero, se hubiese ahorrado alrededor de 68 puntos básicos en la tasa de interés o cupón, equivalente a 24.2 millones de dólares anuales, suma que asciende a un total de 218.1 millones de dólares durante la vigencia de ambos tramos. Es una lástima que esa deuda no se colocase a inicios de enero, pues desde finales del año pasado se sabía que la tendencia de las tasas de interés era, y sigue siendo, positiva. [Cabe recordar que en enero de 2021 se colocaron 2,500 millones de dólares de bonos. Mil millones de dólares a 9 años con a una tasa de 3.875% y 1,500 millones de dólares a 20 años a una tasa de 5.3%.]

Es extraño que el vencimiento de esa nueva deuda soberana haya sido de 7 y 11 años. Si se toma en consideración que la curva de rendimiento en los Estados Unidos se ha estado aplanando, es probable que en términos relativos se hubiese podido colocar la deuda dominicana con un mayor vencimiento y una mejor tasa de interés. Basta con observar que en la actualidad existen bonos dominicanos con vencimiento al año 2060, es decir, con plazo de vencimiento de 38 años.

De acuerdo con la información del Ministerio de Hacienda, de los 3,564 millones de dólares de nueva deuda se utilizaron 1,264 millones de dólares para recomprar 1,100 millones de dólares del flujo de servicio de deuda que vencía en el período 2022-2024. Esto revela que la operación de canje de pasivos implicó un aumento de la deuda dominicana.

Por otro lado, según la nota de prensa, esa entidad señaló: “…esta operación disminuye el costo de deuda en 3 puntos básicos y aumenta la madurez promedio de los bonos en dólares en 0.3 años.” Esa afirmación es limitada y confusa, pues no es lógico que se haya pagado una prima de 164 millones de dólares, equivalente a casi un 15% del servicio de deuda que se saldó por adelantado, para quedarse con una nueva deuda mayor con una tasa de interés similar, pues 3 puntos básicos es apenas un 0.03%, y un plazo de vencimiento ligeramente mayor. Si los datos de Hacienda son correctos, el canje de la deuda no debió realizarse, pues resultó ser una operación muy onerosa para las finanzas públicas.

jueves, 17 de febrero de 2022

Sobre la incidencia tributaria de gravar los servicios digitales

[Escrito el 16 de febrero de 2022]

La Dirección General de Impuestos Internos publicó en su portal el Proyecto de Reglamento de Aplicación del ITBIS a los Servicios Digitales de Proveedores Extranjeros. El objetivo de la publicación del Proyecto de Reglamento es recibir comentarios, sugerencias y observaciones de las personas interesadas en el tema.

La pregunta clave sobre ese tema la realiza y responde la DGII en su portal. ¿Los usuarios dominicanos que contraten o consuman esos servicios digitales pagarán ITBIS? Responde la DGII: “No. El ITBIS será pagado por el proveedor internacional. El reglamento no contempla retención sobre el consumo del servicio a los dominicanos.” Esto significa, según la DGII, que “Este Itbis no podrá repercutirse ni compensarse en la República Dominicana…” Lamentablemente, esa respuesta, que suena bonita para los usuarios de esos servicios, es incorrecta.

La teoría de la incidencia tributaria, que mejoró su rigurosidad con un famoso análisis realizado en 1962 por Arnold Harberger, profesor de la Universidad de Chicago, permite entender cuál es el agente económico, consumidor o productor, que finalmente cargará con ese impuesto. La aplicación del ITBIS a los servicios brindados a través del internet afectará los precios y las cantidades en función de la reacción de la demanda y la oferta a los movimientos del precio final que incluirá el ITBIS.

La carga del impuesto recaerá principalmente sobre el lado del mercado con menor sensibilidad a los precios; es decir, con elasticidad precio más baja o más inelástica. Esto significa que, mientras menos elástica sea la demanda de esos servicios, mayor será el incremento del precio que pagará el consumidor cuando se aplique el impuesto, en consecuencia, será éste quien cargará con la mayor parte del ITBIS. Además, debe tomarse en consideración que el traslado del impuesto al precio que paga el consumidor será mayor en la medida en que el suplidor de esos servicios tenga posición dominante en el mercado.

Si, en contraste, la elasticidad precio de la demanda es mayor que la elasticidad precio de la oferta, el productor o suplidor de esos servicios será quien cargue con la mayor parte del impuesto aplicado. Esto implica que el precio, neto de impuestos, que recibiría el productor se reduciría.

En ambos casos, la aplicación del ITBIS reducirá la cantidad de servicios, pues habrá consumidores que no podrán pagar por los mismos, retrocediendo el volumen total de transacciones.

Lo anterior no significa que el impuesto sea regresivo, es decir, que perjudique más a los pobres. Lo que se quiere decir es que la DGII debe informar en su portal lo que es correcto: el ITBIS aplicado a los servicios digitales perjudicará al consumidor localizado en territorio dominicano, reduciéndole su nivel de bienestar. El nivel de regresividad o progresividad de esa intervención fiscal es tema para otro comentario.

miércoles, 16 de febrero de 2022

La Gran Restricción de Oferta

[Escrito el 15 de febrero de 2022]

Un día como hoy, 15 de febrero, pero de 1989, presenté mi tesis doctoral. Para ese entonces, con 23 años, vivía junto a mi generación la etapa de la Década Pérdida, período que caracterizó la crisis económica que afectó en los años ochenta a América Latina y el Caribe. Inflación, devaluación, contracción económica, desempleo y mayor pobreza fueron los resultados económicos de la combinación de una mala gestión de las finanzas públicas, una política monetaria dependiente de los políticos y la ruptura de los flujos de financiamiento externo.

Esos resultados marcaron a nuestra generación, tal como fueron afectados aquellos que crecieron durante la Gran Depresión de los años treinta en los Estados Unidos. En ese período, el desempleo, no la inflación, fue el principal elemento que impactó negativamente las condiciones de vida de la población estadounidense.

En los años noventa llegó la Gran Moderación. La generación que se desarrolló entre 1991 y 2007 disfrutó de expansión económica estable, baja inflación, tasas de interés reducidas, desregulación financiera, aumento de los precios de los activos reales y financieros y mejora del bienestar. La pobreza retrocedió aceleradamente a nivel global.

A partir de 2008, con la explosión de la burbuja inmobiliaria, el colapso del precio de títulos financieros con niveles de riesgo subestimados y una terrible crisis financiera, inició la Gran Recesión en los Estados Unidos y gran parte del mundo desarrollado. El vertiginoso aumento del desempleo fue el principal resultado económico de ese período. Algunos países europeos, como Portugal, España y Grecia, registraron tasas de desocupación superior al 20%. Eso marcó a los jóvenes de esos países.

La enfermedad del covid-19, declarada como pandemia en marzo de 2020, ha creado las condiciones económicas para el origen de una nueva etapa. El cierre de las actividades productivas para enfrentar la difusión del virus, la disrupción de la cadena de suministro, la reducción de la producción de combustibles y la Gran Renuncia de mano de obra que ha ocurrido en los Estados Unidos desembocaron en una situación económica que podría denominarse la Gran Restricción de Oferta. A diferencia de otros episodios en que ha habido desempleo por falta de demanda, como el período de la Gran Depresión, en esta ocasión la demanda se ha recuperado, pero no lo ha hecho la oferta al mismo ritmo, traduciéndose en un incremento de la tasa de inflación a nivel global.

Afortunadamente, dado que no ha ocurrido ninguna destrucción de capacidad productiva, es posible salir de esta etapa eliminando las restricciones que hoy en día afectan la oferta de bienes. Una mejor coordinación de los eslabones de la cadena de suministro permitiría disponer de mayor cantidad de combustibles, menores fletes, mayor cantidad de insumos y bienes intermedios básicos -como chips-, lo cual se traduciría en menores precios. Es nuestra responsabilidad, como parte de la generación que toma la mayor cantidad de decisiones, lograr ese objetivo por el lado de la oferta y evitar así que los actuales jóvenes tengan que vivir -sin necesidad- una etapa de inflación acelerada y/o elevadas tasas de interés. 

martes, 15 de febrero de 2022

El barril de petróleo en ruta hacia los 100 dólares

[Escrito el 14 de febrero de 2022]

El precio del barril de petróleo cerró hoy en el entorno de los 95 dólares. En los doce meses más recientes, ese precio se ha incrementado en 37 dólares, equivalente a una variación de casi 64%. Esto es doloroso para la economía dominicana, pues por cada dólar adicional, la factura petrolera del país se incrementa en alrededor de 50 millones de dólares al año.

La pregunta clave es, ¿Cuál es la probabilidad de que el precio del barril de crudo supere en las próximas semanas los 100 dólares? Un análisis estadístico de la serie histórica de esa variable permite señalar que, una vez alcanzado el precio de 95 dólares, la probabilidad de que supere los 100 dólares es superior al 90%; es decir, que es un evento que se puede percibir como casi seguro, dada la información que hoy se tiene de la trayectoria de ese precio, condicionada por restricciones por el lado de la oferta y por las tensiones geopolíticas entre Rusia, Ucrania, Estados Unidos y sus aliados.

El gobierno del presidente Luis Abinader y el pueblo deben estar preparados para ese mayor nivel de precios del petróleo, que seguirá empujando hacia arriba la tasa de inflación. Es ese contexto debe destacarse que, de acuerdo con información proveniente del Ministerio de Industria y Comercio, dado el precio del crudo de la semana pasada, que osciló en el entorno de los 90 dólares, los precios de los combustibles en el mercado nacional hubiesen sido mucho más elevados.

Específicamente, el precio de la gasolina premium debió ser 306.60 pesos y se fijó en 287.60 pesos, con un subsidio de 19 pesos por galón. La gasolina regular debió tener un precio de 296.50 pesos, pero, con el subsidio de 26 pesos por galón, se fijó en 270.50 pesos. El gasoil óptimo y regular fueron subsidiados con 28 y 38 pesos, respectivamente, fijándose sus precios en 236.10 pesos y 217.60 pesos por galón. Por último, el precio del gas licuado de petróleo se estableció en 147.60 pesos, subsidiándose ese precio con 15 pesos por galón. En total, el gobierno destinó 600 millones de pesos por concepto de subsidio a los precios de los combustibles. Lamentablemente, la mayor parte de esos recursos será recibida por los más ricos.

Dado que es casi seguro que el precio del barril de petróleo siga subiendo en las próximas semanas, y que el gobierno continúe amortiguando el impacto sobre el consumidor dominicano, lo más recomendable es que se focalice el subsidio. Esa decisión mejorará la progresividad de esa intervención fiscal, permitiendo al gobierno disponer de recursos adicionales para apoyar en otras áreas a los segmentos más pobres y vulnerables.

Expectativa de inflación de largo plazo en Estados Unidos

 [Escrito el 10 de febrero de 2022]

La inflación, definida como la variación relativa del índice de precios al consumidor, es el fenómeno económico que, en la actualidad, mayor atención genera a la población, los políticos y los economistas.  Cuando arrancó la pandemia del covid-19, el tema principal era la recesión y el desempleo asociado con el desplome de la actividad productiva. La recuperación de la demanda global y el rezago de la oferta de bienes ha provocado un desequilibrio en diversos mercados, traduciéndose en un aumento de la inflación. Por ese motivo, la inflación es ahora lo preocupante.

La pregunta clave es, ¿cuál es la expectativa de largo plazo de la inflación? Es decir, hacia dónde se espera que se mueva esa variable a lo largo de los próximos diez años. La expectativa de inflación se puede estimar en los Estados Unidos tomando en consideración la diferencia entre los rendimientos de los títulos del Tesoro a diez años y los Títulos del Tesoro indexados por la inflación a diez años. Hay otras formas de estimar la expectativa de inflación, pero esa refleja la percepción de los mercados financieros que está implícita en los precios de esos instrumentos de deuda.

Entre enero de 2003 y febrero de 2021, la expectativa de inflación a diez años así cuantificada arroja un promedio de 2.05%, que es estadísticamente igual a la meta de inflación que tiene la Reserva Federal, que es el banco central de los Estados Unidos. En ese período, el nivel máximo de expectativa de inflación se registró en mayo de 2004 y noviembre de 2021, colocándose en 2.76%. El mínimo se observó durante la Gran Recesión, específicamente en noviembre de 2008, y fue de 0.04%.

La breve recesión económica asociada con la pandemia del covid-19 provocó que la expectativa de inflación a diez años se colocase en 0.5% hacia marzo de 2020. A partir de ese nivel, y en la medida en que se reanudaban las actividades productivas, la expectativa de inflación comenzó a subir de forma sostenida, con el típico comportamiento zigzagueante de muy corto plazo, hasta llegar a 2.76% en noviembre de 2021 y bajar luego a 2.41% en este mes de febrero. Esto significa que, aun cuando la tasa de inflación observada el año pasado en los Estados Unidos fue de 7%, los agentes económicos perciben que la tasa de inflación convergerá gradualmente hacia el 2% que es la meta de las autoridades monetarias. Qué tan rápido se llegará a esa meta de inflación es la pregunta del millón.   

miércoles, 9 de febrero de 2022

El Banco Central explica el proceso de normalización monetaria

 [Escrito el 9 de febrero de 2022]

El Banco Central de la República Dominicana publicó un interesante documento donde explica el proceso de normalización monetaria, que incluye el aumento de la tasa de interés, y deja claro que el principal objetivo es la reducción de la tasa de inflación.

Cabe recordar que las autoridades monetarias, encabezadas por el gobernador Héctor Valdez, ejecutaron un oportuno programa de estímulo desde marzo de 2020 para minimizar el impacto recesivo de las medidas tomadas para enfrentar la pandemia del covid-19. Ese programa de estímulo monetario, que incluyó la disminución de la tasa de interés de política, se tradujo en préstamos a casi 100 mil agentes económicos a tasas de interés históricamente bajas. Esa liquidez, acompañada por las ayudas sociales, facilitó la recuperación económica, manifestada en un crecimiento del PIB real en 2021 de 12.3% con relación a 2020 y de 4.7% respecto a 2019.

Algo similar, en mayor o menor magnitud, se ejecutó a nivel internacional, estimulando la demanda global. Lamentablemente, la presencia de nuevas variantes del covid-19 limitó el ritmo de recuperación de la oferta de bienes a nivel mundial, provocando un aumento de la tasa de inflación. El comportamiento de los precios de los bienes básicos, de los precios de los combustibles, de los fletes, entre otros, ha generado un proceso de inflación que ha afectado a países de economía abierta como la dominicana.

Así como el crecimiento del PIB de la República Dominicana está asociado con la expansión del PIB de los Estados Unidos, la inflación registrada en el principal socio comercial influye sobre diversos componentes de costos de la estructura productiva dominicana. La tasa de inflación de 7% observada en los Estados Unidos en 2021, es un reflejo de variaciones de precios de insumos y bienes finales que afectan la economía dominicana a través de las importaciones; en consecuencia, una parte de la inflación de 8.5% que se registró el año pasado en el país se debe a factores externos, fuera del control de la política económica nacional.

A través de la tasa de interés de política monetaria, el Banco Central puede influir directamente, pero con cierto rezago, sobre el componente doméstico de la tasa de inflación. Cuando el organismo emisor sube la tasa de interés se reduce la demanda agregada de bienes y servicios, quitándole presión a la variación de los precios. Esa política monetaria restrictiva también influye indirectamente sobre el componente importado de la inflación a través de la estabilidad o apreciación del tipo de cambio. Al mismo tiempo lo hace mediante la estabilización o presionando hacia la baja los márgenes de intermediación que se aplican a los bienes importados.

El objetivo de la nueva postura monetaria más restrictiva es hacer que la inflación converja gradualmente al rango meta del 4±1% durante el horizonte de política. Esa trayectoria de convergencia sería más rápida y menos dolorosa si la inflación importada, la explicada por factores relacionados con la oferta global, también se redujese.

Petróleo, salarios, inflación y tasa de interés en los Estados Unidos

[Escrito el 8 de febrero de 2022]

La combinación de un precio ascendente del petróleo, mayor tasa de crecimiento salarial e inflación más elevada se traduce indefectiblemente en un incremento de las tasas de interés en los Estados Unidos. De acuerdo con declaraciones realizadas por los principales funcionarios de la Reserva Federal, se prevé que a partir de marzo comiencen a registrarse aumentos en la tasa de interés de política monetaria. Inicialmente se proyectaron tres aumentos, ahora se pronostican, por lo menos, cinco alzas antes de que concluya 2022.

En los Estados Unidos, existe una relación estrecha entre el precio del petróleo, que hoy cerró alrededor de los 90 dólares por barril, y las expectativas de inflación. La asociación entre esas variables se explica por el hecho de que el precio del crudo incluye información sobre el comportamiento esperado de la economía. Si se prevé que la economía crecerá en los próximos meses, habrá una mayor demanda de combustibles que tenderá a elevar los precios del petróleo. Esto se traduce en el aumento de la inflación, creándose un entorno propicio para que las expectativas de inflación registren un comportamiento ascendente.

Al creciente precio del petróleo se añade un mercado laboral muy apretado. De acuerdo con el Wall Street Journal, por cada 60 desempleados hay 100 vacantes, “lo que significa que cualquiera que quiera un empleo puede encontrarlo.” Esto significa que la demanda de mano de obra ha estado creciendo, lo cual presiona hacia arriba los salarios, que en los últimos doce meses han aumentado en 5.7%. En enero se crearon 467 mil nuevos empleos, cifra que pudo ser mayor si no hubiese ocurrido la ola de casos de covid-19 provocada por la difusión de la variante Ómicron.

A pesar de que la tasa de desocupación subió entre diciembre y enero de 3.9% a 4%, se prevé que en marzo el banco central de los Estados Unidos comience a aumentar la tasa de interés de política con el objetivo de reducir la tasa de inflación actual y modera sus expectativas. El aumento de la tasa de interés debe hacerse oportunamente, pues reduciría el pico de la inflación. Mientras tanto, la tasa de rendimiento de los títulos del Tesoro a diez años se colocó hoy en 1.96%, nivel similar al existente hacia finales de 2019 y se espera que continúe subiendo en las próximas semanas.  

Para la República Dominicana ese entorno tiene elementos positivos y negativos. Un mercado laboral estadounidense apretado significa que los dominicanos que viven en ese territorio pueden encontrar fácilmente trabajo, y eso es bueno para la economía dominicana. Pero aumentos del precio del crudo, aceleración de los precios de bienes y servicios, y alzas de tasas de interés son factores que impactan negativo las cuentas externas, el balance fiscal y la tasa de inflación de este país. Los hacedores de política económica deben estar muy atentos.

Sargent & Lundy y las pruebas de emisiones de Punta Catalina

 [Escrito el 7 de febrero de 2022]

De acuerdo con el reporte técnico elaborado por Sargent & Lundy, “la unidad 2 de las plantas a carbón no se sometió a una prueba oficinal de rendimiento, y que solo se dispone de un informe de resultados preliminares de la preprueba.” Y concluye de una forma poco rigurosa: “En opinión de la firma consultora, las garantías de la unidad 2 no han sido demostradas adecuadamente.”

 Aquí debo reiterar que las pruebas oficiales y las prepruebas son exactamente iguales, lo cual se le pudo haber explicado a Sargent & Lundy si se hubiese reunido con el equipo técnico de la CDEEE, que estuvo a cargo del seguimiento a la construcción de Punta Catalina. Las pruebas que el auditor denomina oficiales son adicionales y se utilizan para hacer un promedio de los resultados que se colocan en el reporte. Si la varianza de esos resultados es mínima, como sucedió en el caso de la Unidad 1, la información extra que brindan esas pruebas adicionales no cambia el resultado final.

 Debe tomarse en consideración que las pruebas de aceptación y rendimiento de la Unidad 2 empezaron con la preprueba, ejecutada exitosamente el 10 de marzo de 2020, cuando el covid-19 había comenzado a azotar el mundo. No se logró continuar con las tres pruebas oficiales porque el personal de los suplidores internacionales, incluido el equipo de McHale, había recibido instrucciones de salir del país debido al avance de la pandemia y el cierre de los aeropuertos.

 En consideración de la comparabilidad de las condiciones de ejecución de las prepruebas y las pruebas oficiales; de que los resultados de la preprueba de la Unidad 2 eran similares a los obtenidos por la Unidad 1; y que el Código ASME PTC 46 lo permitía, las partes acordaron aceptar los resultados de la preprueba como resultado oficial. Sólo quedó pendiente la validación con instrumentos de prueba de las medidas de emisiones de polvo, que fueron ejecutadas durante la fase de preprueba con los instrumentos en línea (CEMS).

El 24 de abril de 2020 se acordó que, tan pronto se normalizaran los vuelos entre la República Dominicana y Estados Unidos, el personal de McHale realizaría las pruebas de particulado (polvo) de la Unidad 2.  El 29 de julio de 2020, se realizaron las pruebas faltantes de la emisión de polvo, ratificándose los resultados obtenidos en la preprueba y se confirmó que esas emisiones están por debajo de lo establecido en el contrato.

 En base a los resultados obtenidos, McHale pudo ratificar lo que había señalado sobre el desempeño de Punta Catalina: “Los resultados de las pruebas elaboradas sobre la base del Código de Prueba de Desempeño ASME 46, Rendimiento General de la Planta, han demostrado que las Unidades 1 y 2 de Punta Catalina han cumplido con los parámetros garantizados en términos de Producción Neta de Potencia, Rendimiento Térmico Neto y Emisiones de acuerdo con los requisitos del Contrato.”

 Por eso se puede decir que esas unidades de generación son dos obras de arte, que deben ser operadas y mantenidas adecuadamente.

Sargent & Lundy y los pilotes del puente de Punta Catalina

[Escrito el 4 de febrero de 2022]

De acuerdo con lo publicado en la prensa, el reporte técnico de Sargent & Lundy sobre Punta Catalina “contiene fotografías que intentan demostrar la corrosión de los pilotes del muelle de descarga.” Lamentablemente, como reconoce esa empresa, durante su visita a la planta “no pudo determinar si el sistema SA instalado en los pilotes por debajo del nivel de agua, [es] tal como se había diseñado.”

 Si a los auditores se les hubiese entregado toda la documentación disponible sobre el tema de los pilotes del puente, en particular el reporte No. 6222-AZ-RT-800040 del 23 de enero de 2020, se hubiese percatado de que el tema de la corrosión fue debatido ampliamente por los técnicos del Consorcio y el equipo técnico de la CDEEE, quedando claro que los pilotes son de concreto armado con una cobertura adicional externa de acero, cuya parte que queda fuera del mar se corroe, por lo cual se coloca un espesor de acero compatible con la vida útil de esa obra y con la tasa de corrosión de ese metal. Por debajo del nivel del mar, los pilotes tienen una protección catódica, siendo diseñado e instalado con ánodos de sacrificio. Cualquier ingeniero con cierta experiencia en ese tipo de construcción lo sabe.

 Específicamente, el reporte del estudio realizado a los pilotes en enero 2020 indica: “Los resultados demostraron que el acero de sacrificio dura significativamente más que la vida útil del diseño de la estructura, incluso sin ser estructural, y que este concepto es más eficiente que la protección con recubrimiento [de los pilotes].” Y añade ese reporte: “Las mediciones e inspecciones realizadas también confirman la eficacia y lo correcto de los criterios de diseño y parámetros de corrosión.”

 Es una lástima que Sargent & Lundy no tuviese acceso a ese tipo de información, pues se hubiese evitado hacer afirmaciones incorrectas y ambiguas.

Sargent & Lundy, Punta Catalina y la correa transportadora de carbón

[Escrito el 3 de febrero de 2022]

La auditoría técnica realizada por Sargent & Lundy a la Central Termoeléctrica Punta Catalina no es una auditoría, pues no se discutieron los hallazgos con el Consorcio constructor ni con el equipo técnico de la CDEEE -que incluye como ingeniero de la empresa a la centenaria firma estadounidense Stanley Consultants-, responsable de darle seguimiento a la construcción de esa poderosa central eléctrica. Si lo hubiese hecho, estoy seguro de que las afirmaciones incorrectas y ambiguas incluidas en ese informe no se hubiesen producido.

 Lo primero que hay que decir es que, desde mayo de 2020, las dos unidades de Punta Catalina han sido la principal fuente de electricidad de la República Dominicana. Además, la empresa que realizó las pruebas de desempeño de las dos unidades, la firma estadounidense McHale, confirmó que la capacidad neta contratada, la eficiencia térmica y las emisiones son mejores que lo contratado y pagado por CDEEE.  

 Según el reporte de Sargent & Lundy, “la planta está experimentando fallas recurrentes de la cinta en el transportador tubular después de cada operación de descarga de barcos.” Y se afirma: “No está claro cuál es la causa de este problema, ya que podría tratarse de una serie de factores sobre los que no se puede especular, pero que no pueden determinarse únicamente mediante revisión de documentos.”

 Eso significa que Sargent & Lundy, a pesar de tener un contrato de auditoría de dos millones de dólares, se limitó a ver solamente los documentos que le suministró la actual administración de Punta Catalina. Si esa empresa hubiese hecho su tarea correctamente, se hubiese percatado de que la correa transportadora de carbón funciona bien siempre y cuando reciba un mantenimiento adecuado. Además, hubiese podido verificar que la operatividad de la planta nunca ha sido afectada por el trabajo de esa correa.

 Una buena auditoría técnica hubiese evaluado cuál es el programa de operación y mantenimiento que se está ejecutando actualmente, lo cual le hubiese permitido concluir categóricamente que las fallas que pudiesen estar ocurriendo se explican -sin ambigüedades- por la ausencia de un mantenimiento preventivo óptimo.

 En el informe que entregué a las actuales autoridades en agosto de 2020, recomendé que se concluyera el proceso de contratación de servicios de mantenimiento con fabricantes de los principales equipos, entre los cuales incluí a ONT-Bedeschi, que es la firma italiana que construyó ese sistema de transporte del carbón. Es una pena que ese contrato de mantenimiento no se haya firmado y ejecutado.

La inflación en la zona euro llega a máximo histórico

[Escrito el 2 de febrero de 2022] 

La tasa de inflación sigue dando dolores de cabeza a nivel global. Hoy se conoció que la inflación en la zona euro en el mes de enero fue de 5.1%, superando el 5% registrado a diciembre pasado. Esto implica que la variación de los precios sigue acelerándose en una zona que, por años, luchó para subir la inflación hasta la meta del 2%. Ahora el objetivo es bajarla, pues ese fenómeno está erosionando los bolsillos de los hogares.

La zona euro está formada por 19 países europeos, miembros de la Unión Europea, que comparten una moneda común. La política monetaria de esa zona la define el Banco Central Europeo, el cual está encargado de emitir el euro y, mediante un conjunto de instrumentos monetarios -como la tasa de interés-, tiene como meta mantener controlada y baja la tasa de inflación.

A pesar de haber alcanzado una tasa de inflación de 5.1%, explicada por el aumento de los costos de energía y alimentos, la presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, sigue aferrada a la idea de que la inflación actual es un fenómeno transitorio. De acuerdo con ese planteamiento, cuando comiencen a ceder las restricciones por el lado de la oferta, específicamente la disrupción de la cadena de suministro, Lagarde prevé que la inflación se reduciría. Por ese motivo, no quiere aumentar la tasa de interés, pues la experiencia durante la Gran Recesión fue que la tasa de interés de política monetaria se aumentó demasiado pronto y rápido, provocando la pérdida de empleo y caída de la actividad económica.

Ya se verá si en la reunión del consejo de gobierno del Banco Central Europeo, que se realizará mañana jueves, se adopta alguna medida que sugiera un apriete monetario más acentuado. Cabe recordar que actualmente la tasa de interés de referencia de ese organismo emisor es de -0.5%, lo cual no es del agrado de los alemanes, belgas y austriacos, quienes prefieren una política monetaria más restrictiva para controlar la inflación.

La lucha contra la inflación se hace más intensa

[Escrito el 1 de febrero de 2022]

A nivel global se observa cómo los bancos centrales reorientan la política monetaria hacia la lucha contra la inflación. La recuperación de la demanda agregada y la existencia de restricciones por el lado de la oferta se traducen en aumentos de precios que afectan negativamente a la población. Ante esa realidad, se ha decidido aumentar las tasas de interés para reducir la demanda agregada y quitarle presión a la evolución ascendente de los precios.

El Banco Central de la República Dominicana anunció ayer que aumentó 50 puntos básicos a la tasa de interés de política monetaria. Ese incremento se añade a las alzas autorizadas en noviembre, 50 puntos básicos, y diciembre, 100 puntos básicos, alcanzando la tasa de política monetaria un 5%. El objetivo de esa medida es reducir el consumo y la inversión de los agentes económicos, para disminuir la tasa de inflación que cerró el año 2021 en 8.5%.

En su comunicado de política publicado el 31 de enero, el Banco Central indicó que la decisión de aumentar la tasa de interés de referencia se basó en la persistencia de las presiones inflacionarias externas. De acuerdo con el organismo emisor, los precios domésticos siguen siendo afectados por perturbaciones provenientes del exterior vinculadas con los aumentos de los precios de los combustibles y fletes, incremento del costo de las materias primas importadas que se utilizan para la producción doméstica de bienes agropecuarios e industriales, y disrupciones de la cadena de suministro.

La Reserva Federal de los Estados Unidos ha continuado con el desmonte de su programa de estímulo monetario y la semana pasada dejó claro que a partir de marzo se registrarán aumentos de la tasa de interés de referencia.  Originalmente se había señalado que durante este año 2022 se realizarían tres alzas, pero algunos banqueros afirman que es posible que se registren entre cinco y siete aumentos.

En América Latina se han producido ajustes significativos de las tasas de interés. En una lista publicada en el comunicado de política del Banco Central se resaltan los siguientes incrementos: Brasil (725 puntos básicos); Chile (500 puntos básicos); Paraguay (475 puntos básicos); Perú (275 puntos básicos); y Colombia (225 puntos básicos), entre otros.

Los bancos centrales de esos países tienen como meta reducir la inflación y proteger así el bolsillo de su gente. El reto es hacerlo sin provocar una recesión que desemboque en un aumento del desempleo. Un elemento clave para lograrlo es mantener ancladas las expectativas de inflación alrededor de la meta. Esto evitaría que las empresas aumenten los precios al mismo tiempo que se contrae la demanda de bienes y servicios. 

martes, 1 de febrero de 2022

Un punto a favor del presidente Abinader

[Escrito el 31 de enero de 2022]

 El presidente Luis Abinader habló ayer a la nación y lo hizo bien. Después de haber escuchado diversas recomendaciones y críticas sobre el fideicomiso de la Central Termoeléctrica Punta Catalina, decidió que ese tema se discutiese en el Consejo Económico y Social. En ese escenario se podrán realizar las modificaciones que más convengan para que el principal activo productivo del pueblo dominicano sea administrado nuevamente de manera transparente, eficiente y rentable.  

Un objetivo que se debe lograr con ese fideicomiso es maximizar el valor presente del flujo de efectivo que se obtenga a lo largo de su operación, incluyendo su valor terminal. Eso significa que las decisiones adoptadas deben permitir que en los treinta años de vigencia del fideicomiso se obtenga el mayor beneficio posible.

Para alcanzar esa meta se debe saber comprar a tiempo y a los mejores precios posibles todos los insumos y servicios de esa central, como son: carbón, cal, consumibles, seguros, transporte marítimo y servicios de mantenimiento de los fabricantes de equipos, entre otros. Al mismo tiempo, hay que vender la electricidad al mejor precio posible, tomando en consideración el precio de mercado, tanto de contrato como spot. Además, se deben establecer los controles necesarios para minimizar los gastos administrativos, presentando oportuna y detalladamente los informes financieros. Lo anterior significa que todo kilovatio que se produzca y venda debe maximizar la diferencia entre costos, gastos e ingresos, obteniendo esa central eléctrica un provecho económico enorme. Beneficios que, tal como señaló el presidente Abinader, serán recibidos por el Ministerio de Hacienda, por lo cual es conveniente que el incumbente de ese ministerio sea el jefe del Comité Técnico.

Con relación al valor terminal o residual de un activo como Punta Catalina, calculado al momento que concluya el fideicomiso, se puede decir que será significativo. Basta con observar que la empresa generadora de electricidad ITABO, que cumple cuarenta años de operación, sigue supliendo de manera eficiente electricidad, registrando buenos beneficios anuales que arrojan como resultado un valor de mercado millonario. Esa experiencia significa que en el documento de fideicomiso que se firme para Punta Catalina se deben establecer ciertas restricciones al valor terminal, el cual debe y puede ser maximizado si se adopta una buena política de operación y mantenimiento. Si ITABO sigue siendo exitosa después de cuatro décadas, Punta Catalina, que tiene mejor tecnología, debe serlo más y, en consecuencia, su valor terminal como parte del valor de mercado de ese activo será muy importante. 

Perturbaciones políticas que afectan la economía global

[Escrito el 28 de enero de 2022]

El 30 de diciembre pasado comenté sobre el entorno internacional que enfrentaría la República Dominicana en 2022. Las perturbaciones políticas originadas de grandes potencias tienen el potencial de deteriorar significativamente la economía a nivel mundial. En ese contexto resaltan las tensiones de China y los Estados Unidos, por Taiwán y por temas comerciales. Asimismo, se destaca también la situación tensa que se registra entre Rusia y Estados Unidos por el control de Ucrania.

El embajador chino en Washington declaró hoy que los Estados Unidos y China pudieran terminar en una guerra por Taiwán; territorio considerado como una provincia rebelde. Específicamente, el embajador Qin Gang afirmó: “Si las autoridades taiwanesas envalentonadas por Estados Unidos siguen avanzando por el camino hacia la independencia, lo más probable es que involucre a China y los Estados Unidos, dos grandes países, en un conflicto militar.” Una guerra entre esas dos potencias provocaría una ruptura de la cadena de suministro a nivel global, evento que se traduciría en una recesión económica peor que la generada por la pandemia del covid-19.

Por otra parte, Rusia ha colocado en su frontera con Ucrania más de 100 mil hombres con suficiente poder militar como para realizar una invasión de ese país en cualquier momento. Los estrategas militares estadounidenses afirman que el presidente Putin tiene la capacidad de lanzar un ataque relámpago que le permita tomar el control de Ucrania de manera rápida. Esa acción rusa provocaría una inmediata reacción de la OTAN, con los Estados Unidos a la cabeza, que pudiese ser en el ámbito diplomático, comercial, financiero y/o militar.

El nerviosismo generado por las perturbaciones políticas se manifiesta en aumentos de los precios de los combustibles. El petróleo crudo, sus derivados y el gas natural registran comportamientos ascendentes debido a que un conflicto armado entre Rusia y los Estados Unidos deterioraría el flujo de gas natural ruso hacia Europa, que representa un 40% de toda la demanda europea. Hoy el precio del petróleo se colocó en 87.31 dólares por barril y se proyecta que seguirá subiendo en función del escalamiento de la tensión entre las grandes potencias.