miércoles, 26 de marzo de 2014

Loma Miranda

La discusión sobre el futuro de Loma Miranda debe tener dos etapas. La primera debe consistir en la elaboración de un estudio sobre la viabilidad de la explotación de esa zona. La segunda debe recoger el resultado de la decisión óptima de consumo intertemporal.

El estudio sobre la posible explotación de Loma Miranda cuantificaría los costos y beneficios. Esa investigación debe detallar todos los costos ecológicos actuales y futuros que provocaría la explotación minera de esa loma. Asimismo, debe cuantificar los beneficios económicos que recibiría el Estado y evaluar el impacto del uso que se le daría a esos ingresos.

Si los costos son mayores que los beneficios no se debería explotar Loma Miranda. Y ahí se detendría el proceso de discusión y se debería transformar esa zona en un gran parque nacional.

Si los beneficios son mayores a los costos se podría pasar a la segunda etapa de la discusión. Cabe preguntar, ¿cuándo se debe explorar y consumir la riqueza mineral de esa zona? ¿Debe consumirla la presente generación? ¿No es suficiente consumir en el presente la riqueza mineral de la mina de Pueblo Viejo?

La discusión sobre la distribución intergeneracional de los beneficios de la explotación minera debe pasar por un referéndum. Algunos votarán por consumir en el presente los beneficios. Otros votarán para que sean las generaciones futuras las que decidan cuándo y cómo gastar la riqueza mineral de Loma Miranda.


Que prevalezca la voluntad de la mayoría. Esa es la democracia. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario