lunes, 21 de abril de 2025

El que se lleva de consejo

[Frente al Statu Quo. Publicado en Diario Libre el 21 de abril de 2025.] 

El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, advirtió la semana pasada que la política arancelaria de Donald Trump ha creado un escenario desafiante para la institución que dirige. Powell confirmó que esa política incrementará en el corto plazo los precios y reducirá el ritmo de crecimiento económico. Ante ese panorama, la autoridad monetaria tendrá dificultad en decidir si combate la inflación o evita el aumento de la tasa de desempleo. 

“Es una posición difícil para un banco central, en términos de qué hacer,” declaró Powell. Si eleva la tasa de interés a fin de reducir la inflación, destruye empleo. Y si la reduce para disminuir la desocupación, aumentará la inflación. No obstante, insinuó que la Reserva Federal le daría prioridad a la lucha contra la inflación por encima del mercado laboral, ya que su principal objetivo es mantener ancladas las expectativas de inflación y evitar incrementos de precios persistentes. Esa política monetaria elevaría la probabilidad de una recesión económica y de mayor desocupación.

La posición de la Reserva Federal es comprensible, dado que la incertidumbre derivada de los cambios arancelarios de Estados Unidos, en particular los relacionados con China, alcanzó un nivel nunca registrado. El Índice de Incertidumbre de la Política Comercial, elaborado por Darío Caldara y sus coautores de la Reserva Federal, se colocó en 1,520 en abril de 2025, dejando muy atrás el nivel máximo de 266 registrado durante el primer gobierno de Trump y el nivel de 90 observado durante las modificaciones arancelarias llevadas a cabo por Richard Nixon en 1971. 

La crítica de Donald Trump a las declaraciones de Powell fue implacable.  Visiblemente molesto porque Powell no reducirá de inmediato la tasa de interés de referencia, afirmó que “el despido de Powell no puede llegar lo suficientemente rápido,” algo que no podrá realizar hasta mayo de 2026. Dichas declaraciones aumentaron el nerviosismo de los mercados, ya que, si Trump nombrara presidente de la Reserva Federal a un político complaciente con los intereses y requerimientos del Ejecutivo, el costo podría resultar catastrófico. Una postura monetaria inadecuada provocaría aumentos de precios y la pérdida del anclaje de las expectativas de inflación.

Trump debe entender que, en caso de desavenencias con el presidente del banco central, lo ideal es recurrir a una conversación privada que, respetando siempre la independencia de la institución, permita llegar a un acuerdo sobre cuál es la política monetaria óptima en función de las restricciones y demás condiciones económicas actuales. De este modo, en caso de ser necesario modificar la orientación monetaria, dicho cambio se presentaría como una decisión adoptada por las autoridades del banco central y no como una imposición externa. Este punto es fundamental, ya que las autoridades pueden equivocarse, como ocurrió con el mismo Powell en 2022 y 2023, por eso las correcciones deben realizarse preservando la percepción de independencia de sus decisiones.

La incertidumbre generada por Trump, primero a través de su política arancelaria y ahora por sus ataques a Powell, ha provocado una venta masiva de los activos financieros estadounidenses. En lo que va de año, las acciones, los bonos y el dólar han perdido valor de manera significativa. El S&P 500, que refleja la evolución del precio de las acciones de las 500 principales empresas que cotizan en la bolsa estadounidense, cayó un 10.6%. La tasa de rendimiento de las Notas del Tesoro a diez años, que había descendido 45 puntos básicos durante los primeros tres meses del año, subió 20 puntos básicos a partir del 2 de abril, fecha denominada por Trump “Día de la Liberación.” Además, en lo que va de año, el dólar se ha depreciado un 8.4% respecto a un índice de varias divisas y un 9.6% con relación al euro. 

El peso dominicano, que se depreció un 3.5% frente al dólar en los primeros tres meses del año y cuya tendencia permitía proyectar una tasa de cambio cercana a los 70 pesos por dólar a finales de diciembre, ha registrado en abril un cambio de dirección significativo, debido a factores internos y externos. Entre los internos, destaca la decisión del Banco Central de modificar su postura monetaria hacia una más restrictiva, tal como recomendó el autor de esta columna en diversas ocasiones. En particular, se colocaron Notas con una tasa de rendimiento de un 12.25% y, mediante el aumento de la colocación de títulos financieros en el mercado, se absorbió el exceso de liquidez que presionaba al alza la tasa de cambio respecto al dólar. Entre los factores externos, se encuentra la mencionada depreciación del dólar frente a otras monedas, lo que facilitó que en lo que va de año el peso se haya apreciado un 2.4%. 

Las autoridades monetarias dominicanas deben tener en cuenta que la depreciación del dólar a nivel internacional será un fenómeno transitorio. Un caso similar ocurrió con la libra esterlina durante el breve mandato de Liz Truss, quien presentó en septiembre de 2022 una reforma tributaria incompatible con la estabilidad macroeconómica. Esa medida provocó que la tasa de cambio cayera a 1.13 dólares por libra esterlina en octubre de 2022 y que las tasas de rendimiento de bonos Gilt subiesen exponencialmente. Tras la renuncia de Truss el 20 de octubre, la tasa de cambio comenzó a ajustarse hacia su verdadero valor de equilibrio y subió a 1.22 dólares por libra en diciembre de ese mismo año, lo que representó una apreciación de casi un 8% en solo dos meses. 

Con la finalidad de evitar en Estados Unidos un “Momento Liz Truss,” el presidente Donald Trump necesita introducir cambios que garanticen un buen funcionamiento de los mercados y preserven la credibilidad del dólar como principal moneda de reserva. Debe nombrar un nuevo equipo económico con un mayor dominio de los fundamentos económicos y, no menos importante, tiene que escuchar a sus miembros y respetar sus recomendaciones para asegurarse de que se ejecuten políticas que mantengan a Estados Unidos como la economía más importante del mundo. El sabio acepta con humildad un buen consejo, pues quien lo escucha y lo aplica reduce sus fracasos y tiene mayor probabilidad de llegar a viejo con éxito. 

La Incertidumbre según Blanchard

[Escrito el 17 de abril de 2025] 

El profesor Olivier Blanchard es uno de los pilares de la macroeconomía. Blanchard, uno de los economistas más famosos y citados del mundo, fue profesor de Harvard y es profesor emérito del Instituto Tecnológico de Massachusetts, donde se graduó bajo la supervisión de Stanley Fischer. Actualmente es Senior Fellow del prestigioso Peterson Institute for International Economics, una organización dedicada a la investigación de la economía a nivel global. 

En un reciente mensaje a través de su cuenta de X, el profesor Blanchard describió de manera brillante la incertidumbre que se desprende de las acciones y decisiones del presidente Donald Trump y de su equipo económico. Su entrada la tituló “incertidumbre fractal” y dice lo siguiente: 

“Incertidumbre sobre lo que quiere cada miembro del equipo de Trump.

Incertidumbre sobre cómo cada miembro del equipo de Trump cree que se puede lograr. 

Incertidumbre sobre cuáles miembros del equipo de Trump determinan el resultado. 

Incertidumbre sobre cuánto tiempo permanecerá vigente cada decisión.

Incertidumbre sobre cuánto tiempo permanecerá en el cargo cada uno de los integrantes del equipo. 

Incertidumbre sobre cuánto tiempo permanecerá en el cargo el equipo en su conjunto. 

Incertidumbre sobre el que será y hará el próximo equipo. 

Eres un inversor, un operador bursátil, gestor de fondos de cobertura, empresa, importador o exportador. Buena suerte.” 

Esa incertidumbre es la causa de que, desde el 2 de abril, el Día de la Liberación según Trump, los precios de los activos financieros de Estados Unidos, sean acciones, Notas del Tesoro o el mismísimo dólar, hayan registrado una significativa pérdida de su valor y un exponencial aumento de su volatilidad. 

Espero que a la Casa Blanca llegue pronto un nuevo equipo económico, que tenga, por lo menos, mejor dominio de los principios económicos fundamentales, tal como los enseñó por décadas el inmenso padre de la economía moderna, el profesor Paul Samuelson. 

lunes, 14 de abril de 2025

Juego de aranceles

[Frente al Statu Quo. Publicado en Diario Libre el 14 de abril de 2025.]

Estados Unidos y China exhibieron la semana pasada una política comercial inconsistente e irracional. En una carrera por demostrar cuál imponía el arancel más alto, los dos países incrementaron recíproca y sucesivamente los impuestos a las importaciones, hasta que Estados Unidos fijó una tasa del 145% y China estableció un 125%. El nivel de esos aranceles equivale a un embargo comercial entre ambas naciones, ya que los precios en el mercado local serían tan elevados que el consumidor preferiría no adquirir los productos importados, lo que llevaría a una recaudación tributaria nula. 

La disrupción del flujo comercial entre las dos economías más grandes del mundo tendría repercusiones negativas. Mientras Estados Unidos consigue proveedores de piezas y productos elaborados en otras fuentes, locales o internacionales, se registraría un desabastecimiento que provocaría una caída de la actividad productiva y un aumento de precios. 

Las empresas estadounidenses más afectadas serían las que mayor dependencia mantienen con el comercio chino. El 86% de las consolas de videojuegos, el 79% de los monitores, el 73% de los teléfonos inteligentes, el 70% de las baterías de litio y el 66% de las computadoras que importa Estados Unidos provienen de China. Ante esa vinculación y, para evitar un incremento excesivo de los precios al consumidor, la Administración Trump dictaminó, el 11 de abril, eximir de los aranceles recíprocos los teléfonos inteligentes, las computadoras, los chips de memoria y otros productos electrónicos. Esa decisión confirma que los impuestos establecidos no se sostendrían en el tiempo; por tanto, surgieron de una política inconsistente e irracional.  

Las decisiones arancelarias adoptadas desde comienzos de mes han acentuado la incertidumbre y volatilidad en los mercados financieros. El índice VIX, un indicador del nivel de temor del mercado bursátil estadounidense, alcanzó un valor de 60 el pasado 7 de abril, muy superior al nivel considerado normal, que ronda los 15. Mientras, la tasa de rendimiento de las Notas del Tesoro a diez años, el instrumento financiero de referencia y libre de riesgo, se elevó 50 puntos básicos, al pasar del 4% al 4.5% en cinco días. Dicho comportamiento llevó a Susan Collins, presidenta de la Reserva Federal de Boston, a declarar que la autoridad monetaria está preparada para estabilizar el mercado de deuda pública en caso de ser necesario. 

A pesar del aumento de la tasa de rendimiento de la deuda, entre el 2 y el 11 de abril, el dólar se depreció un 3.7% frente a las principales monedas y un 4.5% respecto al euro. Ante esos movimientos cambiarios, Tim Kehoe, profesor de Economía de la Universidad de Minnesota, afirmó que “las fluctuaciones arancelarias descontroladas del presidente Trump han puesto el dólar en peligro.” 

El 9 de abril en la mañana, poco después de la entrada en vigor de la nueva estructura de aranceles recíprocos para más de cien países, Trump declaró que era “un buen momento para comprar acciones,” cuyos precios habían caído en promedio más de un 10%. Unas horas más tarde, la Casa Blanca anunció que había decido posponer la aplicación del arancel recíproco 90 días, período durante el cual se aplicaría una tasa de solo un 10% a todos los países, excepto a China. El mercado bursátil subió vertiginosamente, lo que permitió a algunos inversionistas obtener inmensas ganancias. El mismo Trump mencionó dos casos de instituciones financieras que consiguieron beneficios entre 900 millones de dólares y 2,500 millones de dólares. Laura Veldkamp, profesora de Economía y Finanzas de la Universidad de Columbia, afirmó que ese tipo de operaciones financieras, en las cuales se utiliza información privilegiada, es “definitivamente ilegal.”

La Reserva Federal proyecta una desaceleración de la economía estadounidense, acompañada de un aumento generalizado de precios. John Williams, presidente de la Reserva Federal de Nueva York, estima una expansión del producto interno bruto (PIB) inferior al 1%, muy por debajo del 2.4% inicialmente previsto para 2025, una inflación en el rango del 3.5% al 4% y una tasa de desempleo de un 5%. Por su parte, la encuesta de la Universidad de Michigan revela que la expectativa de inflación para los próximos doce meses subió a un 6.7% en abril, el nivel más alto desde 1981. Asimismo, la expectativa de inflación a largo plazo se incrementó hasta un 4.4%, lo que muestra un claro alejamiento de la meta del 2%. 

Una recesión en Estados Unidos, combinada con aumentos de precios, afectará de manera contundente a la República Dominicana. Ese entorno complicará más la preocupante situación económica actual. Según las estimaciones del Banco Central, en febrero se registró una tasa interanual de crecimiento de un 0.7%. Se trata del cuarto mes consecutivo en el cual la economía se expande por debajo de su ritmo potencial. En los dos primeros meses de 2025, el crecimiento promedio de la actividad productiva fue de un 1.5%, cifra que pone en evidencia el gran desafío que representa alcanzar la variación del 4.5% anual proyectada por el Banco Central y el Fondo Monetario Internacional. 

La actividad de la construcción sigue mostrando una caída estrepitosa. Según datos del Banco Central, en los dos primeros meses del año el sector registró un descenso promedio de un 7.7%. Ese desempeño está asociado a la elevada tasa de interés real promedio que existe en el país, un nivel condicionado por la postura monetaria restrictiva de la Reserva Federal, que mantiene la tasa de interés de referencia entre un 4.25% y un 4.5%. 

La desaceleración de la actividad hoteles, bares y restaurantes, que incluye al sector turístico, es otro aspecto destacable. Esa actividad arrojó un crecimiento promedio de un 3.8% en los dos primeros meses. Pese a que el Ministerio de Turismo no ha publicado todavía los datos de llegada de turistas de febrero, puede inferirse una desaceleración significativa en ese mes. No obstante, ante la disminución de visitantes europeos a Estados Unidos, observada en el primer trimestre de 2025, a causa de la incertidumbre derivada del peligroso juego de aranceles, las autoridades dominicanas tienen la oportunidad de atraer a esos turistas hacia el país antes de que la crisis económica internacional propicie que se queden en Europa.

El crecimiento sigue lento

[Escrito el 11 de abril de 2025]

 El producto interno bruto (PIB) de la República Dominicana creció a una tasa interanual de un 0.7% en febrero. Es el cuarto mes consecutivo que se expande por debajo del ritmo potencial. En los dos primeros meses de 2025, el crecimiento promedio de la actividad se colocó en un 1.5%, lo que revela que será un gran reto alcanzar la variación del 4.5% proyectada por el Banco Central y el Fondo Monetario Internacional. 

La actividad de construcción sigue mostrando una caída estrepitosa. Según los datos del Banco Central, en los dos primeros meses del año ese sector registró un descenso promedio de un 7.7%. Visto el comportamiento de enero, se puede estimar que en febrero la actividad de construcción se contrajo en casi un 8%. Ese desempeño está relacionado con la elevada tasa de interés real promedio que existe en el país, nivel que está condicionado por la postura monetaria restrictiva de la Reserva Federal. 

La desaceleración de la actividad hoteles, bares y restaurantes, que incluye el turismo, es otro aspecto por destacar. De acuerdo con el estimado del Indicador Mensual de Actividad Económica (IMAE), esa actividad arrojó un crecimiento promedio en los dos primeros meses de un 3.8%. A pesar de que el ministerio de Turismo no ha publicado los datos de llegada de turistas de febrero, se puede inferir que en ese mes hubo una desaceleración significativa. 

El comercio y la manufactura, que constituyen dos componentes clave del del PIB, crecieron un 1.8% y un 2.8%, respectivamente. Esas dos variaciones están muy por debajo del ritmo potencial del 5%. 

Por último, hay que indicar que es muy probable que en marzo haya un aumento del PIB debido al efecto base. Cabe recordar que, en marzo de 2024, la economía se expandió en un 1.3%. Pero ese efecto base positivo será transitorio porque en abril del año pasado el IMAE aumentó un extraordinario 8.5%. Así las cosas, se puede decir que lo que es igual no es ventaja. 

El oro como mejor refugio

[Escrito el 10 de abril de 2025] 

La política arancelaria del presidente Donald Trump ha provocado una enorme volatilidad en el mercado bursátil. Esto ha llevado al índice VIX, un indicador del grado de incertidumbre del mercado de capitales, a situarse en 60 el 7 de abril de 2025, superando de manera significativa el nivel considerado normal que es igual a 15. 

El pasado 2 de abril, Trump anunció la lista de sus aranceles recíprocos que aplicaría a sus socios comerciales. A partir de entonces el mercado ha registrado fuertes caídas, con la excepción de una recuperación fuerte, pero transitoria, el 9 de abril provocada por la posposición de los aranceles recíprocos y su reducción a un 10% por un período de 90 días. Esa medida excluye a China, nación que se le impuso un arancel de un 145%. 

Entre el 2 y el 10 de abril el desempeño del mercado bursátil fue terrible. 

El Dow Jones, que incluye a las 30 empresas más importantes de la bolsa de Nueva York, cayó un 6.2%.  

El índice S&P 500, que representa la estructura económica de Estados Unidos, retrocedió en ese período un 7.1%. 

El Nasdaq, que agrupa a las principales empresas tecnológicas, descendió un 6.9%.

En esa semana de masacre bursátil, el precio del oro se incrementó en 1%, alcanzando los 3,197 dólares por onza troy el 10 de abril. El comportamiento del precio del oro pone de manifiesto que ese activo es percibido como un refugio seguro, que cobra una gran importancia en la coyuntura actual caracterizada por una excesiva turbulencia que se desprende de la política arancelaria de Trump. 

lunes, 7 de abril de 2025

El caos arancelario de Trump

[Frente al Statu Quo. Publicado en Diario Libre el  7 de abril de 2025]

El presidente Donald Trump anunció la imposición de “aranceles recíprocos” a sus socios comerciales con el objetivo de reducir las importaciones, aumentar la producción industrial y contraer el déficit de su balanza comercial. No obstante, lo más probable es que el resultado de esas medidas sea la caída de la actividad económica, el aumento de precios y el deterioro de las condiciones de vida de la población. 

La Casa Blanca publicó la semana pasada la fórmula que utilizó para calcular los “aranceles recíprocos.” A pesar de que se había indicado que el citado arancel tendría en cuenta el gravamen promedio que cada socio comercial impone a las importaciones de origen estadounidense, así como las barreras no arancelarias y un porcentaje que reflejase la magnitud de la manipulación cambiaria, la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos indicó que el “arancel recíproco” es la tasa necesaria para cerrar el déficit comercial bilateral entre ese país y sus socios comerciales. 

De manera sencilla, y obviando un par de parámetros cuya multiplicación es igual a la unidad, dicho gravamen se calculó como la mitad de la ratio resultante al dividir el déficit comercial que mantiene Estados Unidos con un determinado país entre el valor total de las importaciones que realiza de esa nación. 

El equipo económico de Trump sostiene que “el déficit comercial persistente se debe a la combinación tanto de factores arancelarios como no arancelarios que impiden que el comercio se equilibre.” Sin embargo, pasa por alto que el saldo comercial guarda una estrecha relación con el nivel de producción y gasto de la economía: a mayor gasto, mayor déficit comercial. Esto implica que, si se pretende reducir dicho déficit, la Casa Blanca debería enfocarse en reducir el déficit fiscal. 

Por otro lado, el uso de la mencionada fórmula para determinar los “aranceles recíprocos” revela un desconocimiento de la teoría de las “ventajas comparativas.” David Ricardo, el célebre economista inglés, expuso en su obra “Principios de Economía Política y Tributación” (1817), que los países se benefician del libre comercio cuando se especializan en la producción de aquellos bienes en los que son relativamente más eficientes y adquieren los bienes que otras naciones producen mejor en términos relativos. Por ello, es normal -y eficiente- que un país registre superávit comercial con algunos socios y déficit con otros. 

En base a la fórmula propuesta por el equipo económico de Trump, a China, Vietnam y Taiwán, que tienen elevados superávits comerciales frente a Estados Unidos, se les impusieron tarifas del 34%, 46% y 32%, respectivamente. Ahora bien, dichas tasas no reflejan los impuestos que esas naciones aplican a las importaciones de origen estadounidense, sino que responden a la existencia de un superávit comercial que se explica por sus ventajas comparativas y por sus altas tasas de ahorro.  

A la República Dominicana, que, en lugar de un superávit comercial, registra un déficit de 5,263 millones de dólares frente a Estados Unidos y exporta bienes por un valor de 7,625 millones de dólares, se le debió premiar con un subsidio de un 35%. Sin embargo, se le impuso un arancel de un 10%, lo que convierte en letra muerta el tratado de libre comercio conocido como DR-CAFTA, que establece una tasa de un 0% para el comercio bilateral entre ambas naciones. Dado que México no fue penalizado por el “arancel recíproco,” a pesar de tener un superávit comercial de 172 mil millones de dólares frente a Estados Unidos, las exportaciones de zonas francas industriales dominicanas perderán competitividad respecto a las mexicanas. Esa situación resulta preocupante, ya que puede provocar una caída de las exportaciones y del empleo de un sector clave para el crecimiento económico de la República Dominicana. 

La reacción del mercado bursátil ante la imposición del “arancel recíproco,” que elevó la tarifa efectiva promedio estadounidense de poco más del 2% al 22%, fue muy negativa. En dos días, las acciones que cotizan en Wall Street perdieron valor de mercado por una suma de 6.6 millones de millones de dólares. En particular, el Dow Jones retrocedió un 9.3%, el S&P 500 cayó un 10.5% y el Nasdaq se desplomó un 11.4%. 

La probabilidad de que Estados Unidos entre en recesión en los próximos 12 meses aumentó la semana pasada a un 60%. La nueva estructura arancelaria, al elevar los costos de producción, tendrá un efecto equivalente a un choque de oferta negativo. El caso de Apple es ilustrador. Se estima que el precio del teléfono IPhone subirá un 54% debido al incremento del costo de importación de las piezas fabricadas en Taiwán, Corea del Sur, China y Japón. Se prevé que esto disminuirá el nivel de ventas y beneficios de la empresa, lo que se reflejó en el descenso de un 15.9% en el precio de las acciones de Apple en solo dos días.   

A pesar de la reducción esperada del crecimiento económico y del empleo, la Reserva Federal mantendrá su actual postura monetaria restrictiva. Jerome Powell declaró que “el impacto económico de los nuevos aranceles será superior a lo esperado, y el banco central debe asegurarse de que esto no ocasione un problema de inflación creciente.” En particular, el presidente de la Reserva Federal declaró que su obligación es mantener ancladas las expectativas de inflación de largo plazo, para evitar que el aumento de la variación de precios pase de ser un fenómeno puntual y transitorio a uno persistente. 

Ante las amenazas de represalias de sus socios comerciales, como la de China, que anunció la imposición de un arancel de un 34% a los productos estadounidenses, es posible que la Administración Trump decida iniciar un proceso de conversaciones bilaterales con el objetivo de evitar que el caos arancelario desemboque en una guerra comercial a escala global. La República Dominicana tiene que defender frente a la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos el arancel de 0% establecido en el DR-CAFTA y utilizar los propios argumentos de Trump para justificar que, dado el elevado superávit comercial de Estados Unidos, se debe eliminar el “arancel recíproco” del 10%.

jueves, 3 de abril de 2025

La fórmula arancelaria de Trump

[Escrito el 3 de abril de 2025]

El presidente Donald Trump anunció la imposición de “aranceles recíprocos” a sus socios comerciales con el objetivo de reducir las importaciones y aumentar la producción en Estados Unidos. Lamentablemente, el resultado de esas medidas se puede resumir en la caída de la actividad económica y en el aumento de precios. Mientras eso ocurre, el mercado bursátil cayó hoy de manera dramática, al arrojar el peor desempeño desde marzo de 2020. 

La Administración Trump reveló ayer la fórmula que utilizó para calcular los “aranceles recíprocos.” De acuerdo con la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos, ese arancel es la tasa necesaria para cerrar el déficit comercial bilateral entre ese país y sus socios comerciales. 

De manera sencilla, y dejando de lado un par de parámetros cuya interacción es igual a la unidad, el arancel se calcula como la ratio del déficit comercial que tiene Estados Unidos con un determinado país y las importaciones que realiza de esa nación. Y se impuso como “arancel recíproco,” la mitad de esa ratio. 

A China, Vietnam y Taiwán, que tienen elevados superávits comerciales frente a Estados Unidos, se les colocó un impuesto de un 34%, un 46% y un 32%, respectivamente.  En base a esa fórmula, a la República Dominicana, que tiene un déficit comercial de 5,263 millones de dólares frente a Estados Unidos y le exporta 7,625 millones de dólares se le debió premiar con un subsidio de un 35%. Lamentablemente, se le impuso un arancel de un 10%, violando el DR-CAFTA.  

El uso de esa ecuación para determinar los “aranceles recíprocos” muestra un desconocimiento total de la teoría de las ventajas comparativas. David Ricardo demostró en 1817 que los países tienden a especializarse en la producción de aquellos bienes en los que son más eficientes, y compran en el extranjero los bienes que no puede producir relativamente mejor que otros. Por ello, es normal -y eficiente- que un país tenga superávit comercial con algunos socios comerciales y déficit con otros. 

Por otro lado, dado que Estados Unidos tiene un superávit persistente en la balanza de servicios por 280 mil millones de dólares y realiza exportaciones por un millón de millones de dólares, si se utiliza la fórmula de “aranceles recíprocos” de Trump, el profesor de Economía en la Universidad de Nueva York, Nouriel Roubini, afirma que habría que imponerles a esos servicios un “arancel” promedio de un 28%. Esto demuestra que el argumento utilizado por la Administración Trump no es consistente ni racional. Ojalá corrija su error, antes de que sea demasiado tarde. 

miércoles, 2 de abril de 2025

El oro como refugio seguro

[Escrito el 2 e abril de 2025]

En lo que va de 2025, el oro es un activo que exhibe un extraordinario retorno en el mercado de capitales. El precio de ese metal, que recientemente superó los 3,150 dólares por onza troy, subió en los primeros tres meses del año en un extraordinario 18%. Ese comportamiento pone de manifiesto que el oro es percibido como un refugio seguro, que cobra una gran importancia en la coyuntura actual caracterizada por una excesiva turbulencia que se desprende de la política arancelaria de Trump. 

En contraste, los principales índices bursátiles han tenido un desempeño negativo. 

El índice S&P 500, que representa la estructura económica de Estados Unidos, retrocedió en ese período en un 4.2%. 

El Nasdaq, que agrupa a las principales empresas tecnológicas, descendió en el primer trimestre en un 10.3%. 

El Dow Jones, que incluye a las 30 empresas más importantes de la bolsa de Nueva York, cayó 1%. 

Para los que le encanta el riesgo, cabe recordarles que el precio del Bitcoin, un activo hiper especulativo, descendió en el primer trimestre en un 12.9%, al cerrar marzo en 82,402 dólares. 

 Y para los que les gusta invertir en burbujas, como Tesla, les digo que el precio de su acción en los primeros tres meses del año perdió un 31.7%. 

El mercado tiene la esperanza de que, cuando el presidente Donald Trump anuncie cuál será la estructura arancelaria definitiva y se despeje la incertidumbre, los precios de las acciones volverán a subir. Mientras eso sucede, yo, como inversionista, me quedó con un portafolio concentrado en títulos de renta fija, como bonos del Tesoro o corporativos. 

El Banco Central sube la tasa de interés

[Escrito el 1 de abril de 2025] 

El Banco Central de la República Dominicana, de manera correcta, ha decidido incrementar la tasa de interés de sus instrumentos financieros para así extraer liquidez del mercado y reducir el ritmo de depreciación del peso respecto al dólar. 

La subasta de Notas del primero de abril tuvo un precio de corte de 94.50, equivalente a una tasa de rendimiento de un 12.25%. Se trata de un instrumento financiero con vencimiento a tres años que, al comparar con la subasta de la semana anterior, arroja un aumento de 46 puntos básicos en la tasa de rendimiento. 

Tal como comenté hace unos días, el incremento del retorno de los instrumentos financieros denominados en pesos es fundamental para reducir el ritmo de depreciación del peso. En el primer trimestre de este año la tasa de cambio se depreció en un 3.5%, al colocarse en 63.43 pesos por dólar al cierre de marzo. Esa variación, la mayor en ese período del año desde 2004, es producto de diversos factores internacionales y locales que incentivan la sustitución de pesos por dólares. 

Entre diciembre de 2024 y marzo de 2025, la tasa de interés pasiva descendió de un 9.81% a un 8.87%, nivel que estimula la sustitución de pesos por dólares, pues la moneda nacional se ha depreciado un 6.6% en términos interanuales y los instrumentos financieros en dólares, con menor nivel de riesgo crediticio, tienen una tasa de rendimiento superior al 4% anual. Por eso recomendé que se adoptaran medidas monetarias que incrementasen la tasa de interés pasiva en 200 puntos básicos. La decisión del Banco Central de emitir Notas con una tasa de un 12.25% va en el camino correcto, ya que hará que suba la tasa de interés pasiva y la depreciación del peso sea menor.

Como en economía no hay almuerzo gratis, una tasa de interés más elevada reducirá el ritmo de crecimiento económico. A esto hay que añadir un entorno internacional que pudiera entrar en recesión debido a la errática e imprevisible política arancelaria de Estados Unidos. La apuesta hay que hacerla al sector privado dominicano que ha demostrado ser muy resiliente y que, en un ambiente de estabilidad macroeconómica, suele recuperarse rápidamente.