[Escrito el 29 de enero de 2015]
La compra
de la deuda con Petrocaribe permitió a los gobiernos de República Dominicana y
de Venezuela ganar simultáneamente.
La
República Dominicana logró recomprar deuda por una suma de 4,027 millones de
dólares, pagando únicamente 1,933 millones de dólares. Esto significa que
Venezuela vendió sus acreencias con un descuento de un 52%.
Esa
operación financiera se traducirá en una reducción de la deuda pública
dominicana equivalente a 3.3% del PIB. Ese es el mayor ahorro logrado en la
historia dominicana y será visto con buenos ojos por el FMI, el cual ha
recomendado la adopción de medidas fiscales que permitan la disminución de la
deuda pública como porcentaje del PIB.
Cabe tomar
en consideración que una disminución de deuda pública se traduce en menores
necesidades de impuestos en el futuro. En consecuencia, la reducción de deuda
lograda es equivalente a un aumento del ingreso disponible –en términos de
valor presente- de la población.
Específicamente,
después de tomar en consideración que la tasa de interés promedio de los bonos
soberanos emitidos para realizar la recompra es de un 6% y la tasa de interés
de la deuda con Petrocaribe era de 1%, se concluye que la ganancia para la
República Dominicana –en términos de valor presente- ascendió a 550 millones de
dólares.
Venezuela
también ganó con esta operación, pues su gobierno está pasando por una terrible
iliquidez, agravada por el desplome de los precios del petróleo. Al día de hoy,
la tasa de interés que tiene que pagar si emite deuda con un plazo de
vencimiento entre 15 y 20 años sería superior al 20%. Por eso a Venezuela le
hace sentido vender sus acreencias para obtener liquidez con un 52% de
descuento, lo cual es equivalente a decir que se está endeudando a una tasa
anual de 9.5%.
Mis
felicitaciones al Presidente Danilo Medina, al Ministro de Hacienda Simón
Lizardo y a Magín Díaz, Director de Crédito Público por esa magnífica operación
financiera.