[Escrito el 9 de diciembre de 2021]
El presidente Luis Abinader anunció hoy al país que su administración llegó
a un acuerdo amigable con la empresa concesionaria de la autopista Juan Pablo
II, que va de Santo Domingo a Samaná, con el objetivo de poner fin al peaje
sombra, calificado como excesivo.
El contrato entre el Estado dominicano y la concesionaria, conformada
por las empresas Autopista del Nordeste, S.A. y Boulevard Turístico del
Atlántico, S.A., empresas dominico-colombianas que operan esas autopistas,
tenía una vigencia hasta el año 2038. En ese convenio el gobierno se comprometía
a pagar un peaje sombra, que le generase un ingreso mínimo a la concesionaria
considerado como necesario para mantener el equilibrio económico del contrato.
De acuerdo con las palabras del presidente Luis Abinader, mediante el convenio,
el gobierno pagará 410 millones de dólares por adelantado, a cambio de eliminar
un pago futuro de 1,900 millones de dólares por concepto de peaje sombra. En
términos de dólares corrientes, la negociación realizada por el gobierno y la
empresa concesionaria implica un ahorro aproximado para el Estado de 1,500
millones de dólares.
Aun cuando no tengo la tasa de descuento que se utilizó en la
negociación, se puede concluir que en términos de valor presente la operación
generó una ganancia de capital a favor del Estado, pues el pago a realizar en
el presente es inferior al valor actual del flujo de pagos correspondiente a
los 1,900 millones de dólares. Si se utiliza una tasa de descuento de un 10%,
la ganancia obtenida por el gobierno por realizar esa operación supera los 500
millones de dólares en términos de valor presente. La eliminación de la
contingencia fiscal que generaba el peaje sombra de ese contrato debe ser bien
vista por las calificadoras de riesgo y por el Fondo Monetario
Internacional.
La decisión de negociar con la concesionara, en vez de irse a un proceso
de arbitraje o a una terminación unilateral, fue positiva. Debe tomarse en
consideración que, para construir esas carreteras, la concesionaria obtuvo millonarios
recursos de organismos financieros internacionales -entre ellos el Banco
Interamericano de Desarrollo- y emitió títulos de deuda en los Estados Unidos, contando
además con la garantía del Organismo Multilateral de Garantía de Inversiones (MIGA)
del Grupo Banco Mundial. Un quiebre unilateral, o un largo proceso de arbitraje,
hubiese sido muy costoso para el país, tanto en términos económicos como
reputacionales. Con la negociación se podrá pagar esa deuda privada con los
bonistas y organismos internacionales, sin afectar la calidad del crédito
soberano dominicano.
Debo decir que la operación es oportuna, pues las finanzas públicas
tienen a la fecha una muy buena holgura financiera. Al 3 de diciembre de este
año, el déficit del Gobierno Central era de apenas 34,923 millones de pesos (algo
menos de 0.7% del PIB), cifra muy distante de los casi 160 mil millones de pesos,
equivalente a 3% del PIB, que proyecta el Ministerio de Hacienda que cerrará el
déficit en 2021. Me imagino que el pago de los 410 millones de dólares,
alrededor de 23,370 millones de pesos, será registrado como gasto corriente
pagado por adelantado, elevándose el déficit público en 0.4% del PIB.
La disponibilidad de reservas internacionales en el Banco Central, que
supera los 12 mil millones de dólares, permite encajar esa operación sin
perturbar el mercado cambiario. Esa magnitud de reservas internacionales supera
los seis meses de importaciones, colocándose por encima del nivel sugerido por
los organismos internacionales. Esto, unido a una adecuada política monetaria y
a la entrada de divisas por concepto de remesas familiares, exportaciones de bienes
y servicios, e inversión extranjera, permite pronosticar que el tipo de cambio
mantendrá la misma estabilidad observada.
La lección del peaje sombra de la autopista de Samaná debe ser
aprendida. En las futuras alianzas público-privadas (APP) debe quedar
claramente establecido y explicado al público el equilibrio de los riesgos
entre el sector privado y el público, así como mejorar la negociación de la
tasa interna de retorno que se debe aceptar al socio privado. Eso permitirá que
las APP se puedan ejecutar sin contratiempos, maximizando su aporte al nivel de
bienestar de la sociedad.
Como regalo adicional para los usuarios de esa autopista, el presidente
Abinader anunció que, a partir del primero de enero de 2022, habrá una
reducción de un 20% del costo del peaje promedio del trayecto comprendido entre
la autopista de las Américas y Samaná. Esa decisión será recibida por la
población como un buen regalo de Reyes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario